Mmmm, aún me llega el aroma dulce de aquella esencia infantil que me envolvía, junto a los tonos pastel de las dibujitos, casi insinuándose entre los finos papelitos que llevaban las niñas dentro, muy bien guardados, de unas carpetas especiales: Hojitas de cambiar, Hojitas medianas, Sobre cartas, Pequeñas, ... Cómo me gustaba distraerme del partido de turno para estar entre ellas y que me dieran aunque fuera la hoja que ninguna quería, pero que yo ansiaba coger y oler con todas mis ganas.
Cómo me gustaba el olorcito dulce de aquellos recreos, y con lo chico que era aún lo recuerdo como si lo sintiera ahora mismo.